El Convento de La Asunción de Muna, Yucatán, data de finales del siglo XVII y presenta en su claustro un conjunto de cuatro cuadrantes solares orientados a los cuatro puntos cardinales. Su fecha de construcción nos es desconocida, pero suponemos es coetánea a la época de erección del convento.
La razón de esta nota, además de destacar la existencia de estos cuadrantes (de los cuales solo uno de ellos "conserva" el gnomon) es el de su peculiar manera de marcar los trazados y nomeclatura horaria, ya que...¡ninguno de ellos es correcto! Sabemos que en el caso de los cuadrantes históricos puede haber ligeras (o grandes) discrepancias en el trazado horario debido principalmente al cálculo de la declinación de la pared, sin embargo este caso...es realmente especial.
Fig. 1: Panorámica del Claustro del Convento de La Asunción de Muna, Yucatán, con sus cuatro cuadrantes solares.
Fig. 2: Cuadrantes a Levante y Mediodía. Aparentemente los trazados son correctos...
Fig. 3. Reloj directo a Mediodía. La nomeclatura horaria comienza a las 6 (VI) horas en el extremo izquierdo del cuadrante, hasta las 12 (XII) horas en la meridiana. Sin embargo la hora que le sigue no corresponde a la una de la tarde...¡sino a las 6 (VI) horas! Esto es así porque inexplicablemente se comienzan a numerar las horas vespertinas desde la 1 hasta las 6, pero comenzando desde el extremo derecho del cuadrante hasta la meridiana, es decir, en sentido contrario (?). En este reloj, por tanto, el ocaso se marca a la una de la tarde.
Mención aparte merece el hecho del incorrecto diseño del gnomon, que no forma con el limbo el ángulo correspondiente a la colatitud del lugar (Muna, Yucatán: 20°29'6.03"N 89°42'46.49"W) sino que se trata de un simple varilla empotrada perpendicularmente "en el polo" de las radiaciones.
Fig. 4. Reloj directo a Levante. A pesar de que este tipo de relojes solo pueden marcar horas del orto al mediodía, aquí la numeración horaria parte de las 1 (I) horas en la parte superior hasta las 6 (VI) horas en la parte inferior...¡y dan la vuelta en orden ascendente hasta las 12 (XII) horas de retorno a la parte superior del cuadrante!
Asimismo, los trazados horarios, especialmente los que deben corresponder a las VI y VII horas presentan una separación muy similar entre sí.
El reloj directo a Poniente tiene una disposición muy semejante con su correspondiente hacia Levante, sin embargo el reloj directo Septentrional presenta trazados horarios idénticos al directo a Mediodía.
Pasamos a las conjeturas:
1ª: La orientación de los cuatro muros es correcta, no he tenido oportunidad de realizar calas exploratorias en el estucado esgrafiado que pudieran evidenciar alguna etapa de intervención anterior, ya que no resulta lógica una implantación de cuadrantes solares bien orientados pero mal trazados.
2ª: La calidad de factura de dichos esgrafiados es muy pobre, lo que hace suponer que se trata de una intervención posterior hecha por una mano no apta para cuestiones gnomónicas.
3ª: Una tercera conjetura puede aventurar que efectivamente, son trazados originales (recordemos las ordenanzas que obligaban a todos los conventos de la Orden Seráfica de contar con cuadrantes solares en sus conventos) pero que tuvieron que realizarse "para salir del paso", tal vez recurriendo o copiando relojes similares correctamente trazados como el caso del Convento de Mama.
Lo más probable es que se trate de un intento de recuperación de fecha relativamente reciente. De hecho los cuadrantes originales posiblemente consistieron en placas de piedra, mismas que se han perdido.
De realizarse una restauración en este conjunto de cuadrantes, pienso que debemos reponer las placas de piedra con trazados correctos (aunque sin correcciones por longitud ni huso horario, para respetar el espíritu de la época) y antes de borrar los actuales trazados, registrar con cuidado este caso curioso de "gnomónica colonial" presente en uno de los inmuebles que conforman nuestro patrimonio cultural arquitectónico.